miércoles, 27 de junio de 2018

Fiesta Cachimbo.... ¿Otaku?

Esa imagen es real, no la he hecho yo, no tengo idea de quién la hizo, yo me limité a tomarle una foto para poder usarla en esta entrada. Para quienes no lo sepan, en mi país, Perú, se les dice "cachimbos" a las personas que logran ingresar a la universidad y están en su primer semestre o año incluso; en la cárcel dirían algo así como "carne fresca"... creo, no sé, lo recordé de algunas películas que he visto, dejando eso claro, continuemos.
Ha pasado medio año desde la última vez que escribí algo para mi blog, no me había olvidado de él, y había tenido muchas ocasiones en que quería escribir algo aquí, pero no lo había hecho por... no puedo decir exactamente por qué, como sea se supone que esta entrada la iba a escribir hace ya varias semanas, hasta se lo había dicho a un amigo, Saika, la idea coincidió con la publicación de un vídeo de uno de mis Youtubers favoritos, DayoScript, el vídeo en cuestión tiene el nombre de "El ciudadano Kane de los videojuegos no existe".
Justo cuando estaba pensando escribir esta entrada (hace semanas) salió este vídeo, lo que me inspiró aún más a "querer escribirlo" , lo coloco entre comillas porque igual he terminado haciendo esto un mes después, pero en fin, el vídeo en cuestión gira en torno a una pregunta, ¿el videojuego es un arte?, actualmente el cine lo es; pero hubo un tiempo que no se le consideraba más que un simple pasatiempo, tiempo en el que la palabra cine ni siquiera existía, Dayo nos cuenta un poco y de manera bastante resumida cómo el cine nació y se convirtió en un arte; pero hizo algo más, este extra fue lo que a Saika le fastidió un poco, Dayo nos contó cómo fue su relación con los videojuegos, es bien sabido que, incluso ahora, jugar videojuegos es considerado un simple pasatiempo y es más, llega incluso a ser visto como un pasatiempo casi que al nivel que drogarse o emborracharse, este modo de pensar, claro, se ha dio reduciendo con los años, pero antes no era así, y Dayo en ese vídeo nos cuenta un poco... de él. Para este punto voy a suponer que habrás dado click al vídeo, lo habrás visto completo y así no tengo que contar lo que él nos comparte; por lo que pasaré a comenzar a escribir lo que vendría a ser el verdadero cuerpo de esta entrada en el siguiente párrafo.
El anime fue para mí un descubrimiento glorioso, no sé si lo dejé bastante claro en entradas anteriores, o, si es que nunca antes me habías leido, quiero dejarlo claro, el anime y el manga (que van de la mano) son muy importantes para mí, el prólogo de todo fue, como para muchos de mi edad (23 años), Dragon Ball, ese anime al que cualquiera de mi época y por ahí, fue llamado y referido por su madre y/o padre como "esos dibujitos" por supuesto que habían más 'dibujitos' como Dragon Ball; pero me atrevo a decir que era el más representativo; conocí otros "dibujitos" que parecían bastante simulares y ya notaba cierta similitud que los diferencia bastante de otros "dibujitos" como 'Coraje el Perro el Cobardo' o 'Las chicas superpoderosas' por mencionar un par, desde el principio noté cierta diferencias y similitudes en los "dibujitos" que miraba, no fue hasta que se estrenó 'Naruto' en Cartoon Network que decidí investigar y "descubrí" el término 'anime'.
El anime en mi ciudad era bastante escaso, pero al parecer ya se había empezado a propagar; pues, aunque no encontré muchas tiendas de DVDs que vendiera además de películas, anime, sí que encontré una que vendía anime exclusivamente; con esto, lo que quiero decir es que, cuando yo empecé, el anime no era algo especialmente popular, la gente no consideraba Dragon Ball como anime, que a ver, sí, si lo analizamos detenidamente, el 'anime' no es diferente de cualquier 'cartoon' del estilo "El increible mundo de Gumball", pues ambos son en su esencia más básica "dibujitos", son dibujos, dibujos que han pasado por un proceso que al ser colocados una al siguiente del otro dan como resultado una imagen en movimiento, pero son "dibujos", por lo que es bastante viable decir que las caricaturas o cartoons es "anime" o que los anime son "cartoons", y es más, hay un término que puede englobar todo "animaciones", que viene de 'animar' que se puede definir como 'dar vida' lo cuál en su definición más simple puede ser descrita como 'dar movimiento a algo' y aún así nosotros nos esforzamos en crear una diferenciación... [suspiro] lo cierto es que, como con todo, las cosas, en mayor o menor medida, reciben algo, que podríamos llamar, "un toque personal" es por ello que a pesar de todo, "sí vemos" una diferencia clara en el estilo que tiene un 'anime' o un 'cartoon'; aunque actualmente ambos estilos intentan, sacar algo del estilo del otro.
Reformulando un poco la pregunta que escribí un par de párrafos atrás ¿es el anime es un arte?, durante años yo he intentado, sin saberlo, decir que sí lo es, mis padres colocaban a "Ed, Edd y Eddy" y "Supercampeones" en el mismo saco y para mí (y aún lo defiendo) no lo son, el anime "suele tratar" temas más complejos y serios, ¿verdad?.
Al igual que Dayo, yo de niño fui gordo y, al igual que Dayo; no me gustaban los deportes, y el fútbol, que es casi como una religión más en mi país, no me llamaba la atención, no tenía interés en ir a estadios a ver a 22 hombres pelearse por una pelota, cosa que, seguramente, decepcionó a mi padre, no solía salir a jugar en los recreos en primaria y buena parte de la secundaria, no era muy sociable y mis compañeros solían meterse conmigo, venga, lo que ahora llaman bullying o, usando términos más peruanos, yo era al que 'agarraban de pavo' súmele a eso el hecho de que además era el empollón de la clase, siempre estudiando y sacando buenas calificaciones menos en "Educación Física" pues se me daban mal los deportes y, repito, no me gustaban, vaya imbécil ¿verdad?.
Al principio comencé ocultarme en los libros, en la literatura, en las historias, por supuesto, no eran "Caballeros del Zodiaco" pero, al menos en ese entonces, había más para escoger, los libros ofrecían diferentes mundos fantásticos, como el de "Harry Potter" o "Narnia" me leí todos sus libros; pero entonces me encontré con el anime, con esa tienda, por supuesto es más fácil disfrutar de algo que está en vídeo que algo que te tienes que imaginar por completo, recalco, es más fácil de "ver" y, por lo tanto, de disfrutar; pero, como dije, en el tiempo que me topé con ese mundo, este no era tan popular, por lo que me sentí como parte de algo exclusivo, parte de algo... especial.
Inuyasha, la gente no solía buscarme, a no ser que fuera para jugarme alguna mala broma o pedirme copiar ayuda con alguna tarea, cosa por la que empecé a cobrar poco después de que descubrí el anime, pues este, como es fácil de entender, costaba dinero; fue cuando estaba como por segundo de secundaria, que una de mis compañeros me preguntó por Inuyasha, un anime que se transmitía por Cartoon Network, pero que se había quedado medio estancado en cierto punto, por supuesto, yo ya había conseguido ver capítulos que no se habían transmitido aún por ese canal e incluso las películas, me pareció raro que alguien me preguntara por un anime, que alguien me hablara de algo que me gustaba, seguimos hablando algunas semanas y llegué incluso a prestarle los DVDs de las películas de Inuyasha, creo que no exagero al decir que ella fue la primera amiga que tuve.
Aún siento el anime como algo especial; pero, con el tiempo, me surgió esta extraña sensación de no querer decir que me gustaba el anime, no porque me diera vergüenza el hecho de que me gustase, si no por el hecho de que la gente relacionase al anime conmigo, y repito, no porque sintiera que me hiciese ver mal, si no porque sentía que YO hacía ver mal al anime, que YO fuera eso que hiciera a la gente "normal" decir que el anime era cosa de gordos raros sin amigos y poco sociables, en la parte más profunda de mi ser quería que la gente viera lo genial que era el anime y que no era solo cosa de "gordos frikis"... el problema era... que yo era un gordo friki.
Resulta que no tenía que hacer nada; y lo intenté, hice ejercicio, bajé bastante de peso y mejoré mis habilidades sociales, sigue sin gustarme el fútbol, pero, eh, no todo podía ser perfecto... sin embargo, al final, el anime, poco a poco se fue extendiendo, el gusto por el mismo se ha ido propagando, a tal punto, que no es muy difícil encontrar a alguien que le guste el anime, "gente normal" gente a la que le encanta el fútbol, que va a estadios a animar a su equipo y que además también mira anime; gente que si yo hubiera visto hace años, habría considerado imposible acercarme, y que ahora les gusta el anime, ya tenía una conexión, ya no estaba totalmente excluido... ¿verdad?
El anime se ha normalizado tanto que ya no es especial, por ahora creo que esa es la mejor manera que tengo para expresarlo, y lo que me hace decirlo creo que está bastante bien representada en la imagen del principio, una fiesta para los recién ingresados... con temática anime... Siempre tuve idealizado el tema de las fiestas, quería poder disfrutar de alguna, aunque sabía que no podría, no me gusta bailar ni los sitios con mucha gente, dos de las características principales de una fiesta... creo, y no consigo visualizar para nada cómo sería una fiesta con temática anime, y lo poco que mi mente puede llegar a imaginar sobre cómo podría ser... me da repelús, grima y ahora tengo un problema prácticamente idéntico al original respecto a las fiestas, me debería gustar, la idea me debería parecer atractiva; pero no es así... y no logro descubrir por qué.
Aún sigo sin ser una persona muy sociable, me he encontrado con personas a las que les gusta el anime y con las que he hablado largo y tendido sobre series, discutido teorías, intercambiado recomendaciones... pero, no sé, por un lado me gusta que halla más gente que vea anime, por otro, siento que lo han bastardizado y, ojo, no voy a decir que TODO el anime sea algo así como 'solo para una clase privilegiada' o que todo lo que sea anime es digno de ver, no, hay animes que desearía no haber visto por lo malo que son; hay de todo y siento que hay cosas que no se debería mezclar... supongo que al final... más que querer formar parte de su mundo, yo quería que ellos formaran parte del mío.
Ya no veo tanto anime como antes, pero cuando lo hago, lo disfruto, más allá de que este sea bueno o malo, sé que es probable que encuentre a alguien (y no me refiero solo en internet) con quien podré hablar al respecto, puede que no me guste tanto cómo los 'jóvenes de hoy en día' (ahora me siento un abuelo) están asimilando y llevando la cultura Otaku ahora, la dirección que esta está tomando... pero tampoco me disgusta completamente. Una cosa sí que no la puedo negar, el anime y los otakus han llegado para quedarse... supongo que solo me queda ver y esperar.

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